Ya sabemos que los peritos tienen y cada vez más, una gran presencia en los procedimientos legales y judiciales. Permitiendo ayudar a los jueces y tribunales a resolver y dictar sentencias justas, gracias a los informes y pruebas que estos les proporcionan.
Accidentes de trafico, vicios ocultos, negligencias médicas, tasaciones inmobiliarias y muchos más, son los ámbitos en los que un perito puede especializarse para ofrecer sus mejores servicios, profesionales y de calidad. Eso si, existen varios rasgos que cualquier perito debería tener independientemente del ámbito o sector al que se dedique y que les permitirán investigar y analizar los hechos de forma eficiente.
Estas características os las exponemos a continuación:
- Meticulosidad:
Los peritos deben ser metódicos y meticulosos para poder obtener toda la información necesaria para elaborar un informe pericial completo. Si estos actúan de forma espontánea o improvisada, esto puede llevar a que invaliden sus trabajos, ya sea por defectos de forma o falta de la información necesaria o esencial.
- Oratoria:
La capacidad oral para transmitir mensajes es fundamental para los peritos, que deberán presentar y explicar sus informes ante los jueces y tribunales. También cabe añadir que siempre se puede mejorar este rasgo, por lo que no deberán parar de practicar y ensayar.
- Paciencia:
Un perito sin paciencia no podrá lograr mucho en su carrera, porque en su trabajo deberá enfrentarse a una gran variedad de casos y situaciones. Y estos casos pueden durar en ocasiones incluso años, tiempo durante el cual deberán ir obteniendo la documentación e información oportuna y adaptarse a los objetivos de otros sujetos (como pueden ser el abogado o los clientes). Además, los juicios pueden suspenderse por lo que deberán igualmente presentarse el siguiente día indicado y como no, deberán afrontar los ataques del contrario.
- Disponibilidad:
Tal como se deduce de de la anterior característica, los peritos deberán estar disponibles y listos en cualquier momento, según los requieran los abogados o clientes. Por lo que será imprescindible organizarse y buscar la máxima eficiencia posible, para cuando se acumulen los casos con los que trabajen.
- Experiencia:
La experiencia tiene una alta importancia en cualquier ámbito de trabajo para los peritos, pero lo que es una evidencia, es que no todos los peritos tienen experiencia; probablemente porque están empezando a trabajar. En estos casos, se necesitará cubrir esta falta de experiencia con el estudio, la práctica y los conocimiento suficientes.
- Especialización:
Cada perito debe ser experto en su materia. Es el hecho de que este especializado en un ámbito o campo concreto lo que le ofrece la cualidad y autoridad para presentar sus informes y pruebas de forma creíble y entendible, pese a que sean términos complejos o controvertidos.
- Resolución:
Por pocos que sean los recursos de los que pueda aprovecharse un perito, esto no deberá ser causa de un mal trabajo. Porque con pocos o muchos datos, el informe a realizar deberá ser igualmente compacto y válido.
- Persuasión:
Este es uno de los rasgos más importantes, que deberá poseer un perito, si quiere conseguir sus objetivos. Ser persuasivo con los clientes le permitirá conseguir más oportunidades laborales y respecto a los jueces, ser persuasivo permitirá a los peritos tanto ganar reputación, como juicios.
- Persistencia:
No dejarse influenciar es la clave para que lo que pueda decir un perito no se vea comprometido en sus declaraciones o pueda considerarse falso o incompetente. Persistir en lo que dijimos desde un primer momento es por lo tanto necesario para que sus argumentos sean válidos y consistentes.