Una negligencia médica se produce cuando en un hospital, centro sanitario o profesional médico no sigue los protocolos establecidos, causando daños físicos y/o morales en el paciente.
La negligencia médica es una tema grave y delicado para el ámbito de la medicina y de la salud, pues puede afectar a la reputación de la organización y del experto en medicina.
De hecho, si se agravan las consecuencias, como por ejemplo, produciéndose graves lesiones y daños, puede afectar al deterioro de la salud del paciente e incluso dando lugar a la muerte.
Ante este tipo de situaciones el afectado suele tomar la decisión de la interposición de demandas y denunciar al experto responsable del daño causado. Durante una negligencia médica se deben seguir una serie de fases clínicas:
- Exploración
- Diagnóstico
- Pronóstico
- Tratamiento
Si la negligencia médica ha sido ocasionada por la sanidad pública, se puede proceder a realizar un proceso de reclamación patrimonial ante la Administración Sanitaria competente en la materia.
La propia Administración Sanitaria correspondiente se encargará de examinar y estudiar el daño ocasionado para determinar si se trata o no de una negligencia e incluso de discapacidad en el caso de haberse producido daños mayores a partir de la negligencia médica ocasionada.
Se deben tener en cuenta las aportaciones de todos los entes involucrados, paciente, profesional de la medicina experto, y cualquier persona que haya estado presente ante la negligencia médica producida.
Una vez que todos las personas involucradas hayan intervenido y hayan aportado su visión, se procede a efectuar un informe pericial en el que se redactará todo lo ocurrido y las posibles conclusiones.
El proceso finalizará una vez que se emita un dictamen o sentencia, la cual tiene lugar en un plazo posterior a seis meses de haberse cometido el daño o negligencia médica ocasionada. Este dictamen es el que establecerá si le corresponde a la víctima del daño ocasionado recibir o no una indemnización.
En el caso de que la Administración, no tome parte del asunto en ese periodo de tiempo, el afectado por la supuesta negligencia médica puede proceder a los tribunales de lo Contencioso Administrativo.
En lo que respecta al plazo para realizar la denuncia de la negligencia médica ante la Seguridad Social, debe comenzar desde que se produce el daño o negligencia médica en el paciente. Una vez que el paciente note mayores síntomas por la lesión, daño o enfermedad causada, puede proceder al efectuar la denuncia.
Este procedimiento tiene como objetivo principal la indemnización por los daños generados por el experto.
El paciente afectado tiene como plazo un año desde que se ha producido la negligencia para poder presentar una denuncia para reclamar la misma. Es importante destacar que, en el caso de producirse una enfermedad o lesión grave derivada de la negligencia, el periodo de tiempo de un año empieza a contar a partir de la cura o de cuando el paciente se encuentra estable.
De hecho es común que resulte complicado, determinar exactamente el momento en el que se ha producido la mala praxis. Por lo que, la mejor opción es ponerse en manos de expertos cuanto antes.
Si usted considera que ha sido víctima de una negligencia médica, y que ha supuesto un gran peligro para el afectado o para usted, lo mejor es pedir una segunda opinión de un experto en materia de negligencias médicas.
Una vez que tengas presente, el informe redactado por parte del perito se puede iniciar el proceso de reclamación y como consecuencia determinar la indemnización que le corresponde a la víctima afectada.